¿Casualidad o destino? El Oviedo mira a la historia para romper su mala racha fuera
El equipo carbayón visita al Elche con el reto de sumar a domicilio y con los precedentes históricos como estímulo en busca de un resultado esperanzador
La Liga
El Real Oviedo afronta la quinta jornada de LaLiga con un reto evidente: sumar sus primeros puntos lejos del Tartiere. Hasta ahora, las salidas a Villarreal y Getafe se saldaron con derrotas, una dinámica que los azules quieren cambiar este domingo en el Martínez Valero, donde esperan encontrar el punto de inflexión que refuerce la confianza del grupo.
En la previa, Veljko Paunovic fue claro: "necesitamos ganar fuera", dijo, subrayando que el desafío es tanto futbolístico como mental. El técnico pidió alejar el pesimismo y confió en que el trabajo diario empiece a dar frutos, consciente de que un triunfo a domicilio supondría un impulso clave en el arranque de la temporada.
La historia, además, ofrece un curioso argumento para la esperanza. En la campaña 1987/88, el Oviedo logró el ascenso a Primera. Apenas un año después, en la 1988/89, recién regresado a la élite, los azules ganaron en Elche y también a la Real Sociedad, un paralelismo con el presente curso, en el que ya se impusieron al conjunto donostiarra en el Tartiere. El recuerdo más cercano también invita al optimismo: en la temporada 2023/24, el conjunto carbayón venció 0-2 en el Martínez Valero con goles de Colombatto y Paulino.
Con esos precedentes, el choque ante el Elche se presenta cargado de simbolismo. Paunovic no quiso dar pistas en exceso, pero reconoció que su equipo maneja distintas variantes tácticas y que la opción de jugar con tres centrales está sobre la mesa. Una declaración que abre la puerta a un posible cambio de sistema, en busca de ese punto de solidez que ayude al Oviedo a estrenarse como visitante y a confiar, una vez más, en que la historia pueda repetirse.
