El Real Oviedo lleva a la práctica su plan
Los tres goles anotados por los azules desde la llegada de Paunovic partieron desde un centro lateral, algo que ya era tendencia con Javi Calleja
REAL OVIEDO

No se le da mal al Real Oviedo sacar tajada de los envíos al área desde las bandas. Para muestra, estas dos últimas jornadas ligueras. Comenzando con el partido ante el Málaga, los dos tantos anotados por los azules nacieron desde ambos costados. El primero, de una acción a balón parado desde la izquierda botada por Jaime Seoane que terminó con el remate directo a la red de Colombatto. Y el segundo, tras un centro lateral de Nacho Vidal que Alemão brindó en bandeja al defensa rival Manu Molina para que pateara el esférico a la red.
Una semana después, en Ipurúa, de nuevo una jugada desde la banda desembocó en el único gol del Oviedo ante el Eibar. Lucas Ahijado colgó un buen balón desde la izquierda para que el pichichi azul, Alemão, se encargara de introducirlo en la portería de Magunagoitia.
Así todo, no es que sea este aspecto del juego algo nuevo para los azules, que ya con Javi Calleja en el banquillo buena parte del juego ofensivo recaía en las bandas. Así lo demuestran las estadísticas. El Oviedo es el cuarto equipo de Segunda división que más balones cuelga al área, con 672 envíos en estas 34 jornadas disputadas. Solo superan estos registros el Elche, con 673 centros, el Córdoba, con 676, y el Granada, líder destacado en este ranking, con 732.
Si profundizamos en estos datos, el Oviedo sube un par de peldaños si se tienen en cuenta qué envíos al área son de calidad y cuáles no. Con 172 centros buenos (el 25% del total), los carbayones son los segundos en este rango, solo superados por el Elche, con 183 centros al área aprovechables.
Una muestra del potencial que tiene el Oviedo en este tipo de acciones es que sigue siendo el mejor equipo cuando se trata de rematar con la cabeza. En este sentido, los oviedistas han marcado 13 de sus 45 goles con la mollera, una cifra que solo iguala el Tenerife. Alemão, con seis dianas con la cabeza, es el mayor exponente de la Segunda división.