El Real Oviedo no teme a las alturas
Los azules solo han encajado una derrota ante los equipos que en estos momentos optan al ascenso a Primera División
Un gol por la escuadra en el tiempo de descuento. Ese es el único borrón en la etapa de Luis Carrión al frente del banquillo del Real Oviedo. Aquel espectacular tanto de Marcos André en el minuto 92 con el Real Valladolid sirvió para sellar la única derrota de los azules desde que el técnico catalán asumiera las riendas del equipo oviedista. Y de paso, firmar el único tropezón de los carbayones ante uno de los equipos que marcan el paso en Segunda División.
Y es que el conjunto azul solo contabiliza esa derrota en los cuatro enfrentamientos que lleva ante los seis mejores clasificados. Un encuentro, ese ante el conjunto pucelano, en el que los azules estaban en plena mudanza del banquillo oviedista. En cualquier caso, el equipo azul no le perdió la cara en ningún momento al partido ante un equipo descendido de Primera y diseñado a conciencia para volver. En estos momentos, el equipo pucelano es segundo en la clasificación.
Contra el resto de los equipos de arriba, el Real Oviedo puntuó. Es el caso del encuentro ante el líder actual, el Leganés. Hace escasos diez días, el equipo de Luis Carrión sumó en Butarque un meritorio empate sin goles ante el equipo con más puntería de la categoría. Mismo resultado que en el derbi asturiano del pasado 9 de septiembre ante el Sporting de Gijón, tercero en la tabla y uno de los equipos más en forma en estos momentos. Con el Racing de Ferrol, quinto con 26 puntos, el Real Oviedo también sumó uno para el zurrón, después de empatar 1-1 en el Carlos Tartiere.
Ahora llega el Eibar, en puestos de promoción de ascenso. Los armeros acumulan diez partidos consecutivos sin perder, con siete victorias y tres empates. Unos registros que los etiquetan como el equipo con mejor racha de la categoría. Es precisamente esta dinámica la que el Real Oviedo quiere dinamitar con una victoria que lo acerque a los puestos de promoción. Esos que tanto le seducen, pero que tan poco le intimidan.