Mucho dinero, la continuidad de un proyecto y, de paso, una alegría

El conjunto gijonés aborda dos jornadas decisivas en las que, aunque no depende de sí mismo, tiene el deber de sumar los seis puntos

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Sporting
Guerrero, con Varane, en el Bernabéu.
Mié, 22/05/2024 - 21:20

El Sporting de Gijón tiene otra oportunidad para hacer sus deberes y, esta vez, esperar el fallo del rival. Todavía podría alcanzar la cuarta plaza, pero la opción real parece la sexta. El objetivo es el de sumar los seis puntos para poder aprovechar cualquier tropiezo. En caso de ascenso, son dos los principales aspectos que cambiarían el horizonte del club. 

La economía: Jugar en Primera división dispara los ingresos televisivos. No hay color entre una y otra categoría. El club sería solvente económicamente y, salvo inversiones disparatadas en fichajes, volvería a dar beneficios sin demasiados malabarismos. Incluso un hipotético descenso al curso que viene garantizaría más posibilidades reales de ascenso gracias a la ayuda por el descenso. 

El término medio, el de alcanzar el play off y quedarse a las puertas del salto, también supondría una inyección económica. En primer lugar, los ingresos televisivos de LaLiga serían mayores por el puesto en la clasificación, asistencias al campo y audiencias. Además, la entidad asturiana obtendría ingresos importantes en taquilla. Más si cabe si llegase a la final, celebrando dos encuentros en su estadio. El play off no está incluido dentro de la cuota del abonado. Casi con seguridad, el Grupo Orlegi establecería un suplemento tal y como hizo en el derbi asturiano. 

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Mascarell

 
Siguiendo con lo económico, el peor de los escenarios sería el quedar entre el undécimo y séptimo clasificado. Los ingresos serían mayores que los del curso pasado, tanto por televisión como los obtenidos por el club a través de taquilla y ventas en sus tiendas, pero insuficientes para competir en igualdad con los más poderosos de la próxima Segunda. Para todo esto es necesario señalar lo perjudicial que puede llegar a ser la reclamación del Espanyol por el traspaso de Pedro Díaz. 

Continuidad: Por otro lado, en lo estrictamente deportivo, el ascenso acercaría la renovación de Miguel Ángel Ramírez. Su continuidad daría estabilidad al crecimiento, entre otros, de Diego Sánchez o Nacho Martín. También aseguraría la permanencia de Gaspar Campos y multiplicaría las opciones de prolongar contratos de futbolistas pretendidos por otros equipos.

La alegría: No es este un asunto menor. La afición es la que ha disparado la recaudación en abonos, entradas y venta en tiendas. Es la misma que ha arropado al equipo desde el inicio de la temporada y que, de algún modo, le ha ayudado a levantarse cuando se ha caído en la segunda vuelta. Sin su aliento no hubiese sido posible ninguno de los mejores escenarios económicos y deportivos descritos en las líneas previas.