Una promesa con Liam, una profecía y una primera vez: La intrahistoria del gol de Gelabert

¿El lugar? La sala de prensa de la Escuela de Fútbol de Mareo. ¿El motivo? El intercambio de cromos organizado por el Sporting de Gijón durante las vacaciones navideñas. ¿Los protagonistas? El joven Liam, de nueve años, y César Gelabert. Con estos ingredientes se cocinó la celebración del primer gol del centrocampista palentino con la camiseta rojiblanca. Para coronar la fiesta, en la casa del eterno rival. 

En el minuto 79 del derbi asturiano, el Sporting encendió los plomos. Lo hizo Dani Queipo para birlarle la pelota a un Hassan remolón. Lo hizo Jonathan Dubasin para tener la claridad para conducir y levantar la cabeza. Y lo hizo César Gelabert para cruzar el balón entre las piernas de Aarón Escandell y empatar el duelo regional. Nada más marcar, fue abrazado por Queipo antes que llegaran el resto de sus compañeros. Levantó los dos brazos en dirección a la enloquecida parroquia visitante y, en pleno de la vorágine, se llevó su mano izquierda a la cabeza. Un gesto pensativo. Nada casual. Era algo que se había cocinado una semana atrás en la Escuela de Fútbol de Mareo. 

El éxito fue total cuando el Sporting de Gijón hizo el llamamiento a su afición más juvenil para intercambiar cromos de la colección de la Segunda división en la sala de prensa de Mareo. Esperando la fila 45 minutos antes del comienzo del acto, Liam era el primero en acceder al espacio Leli Rubiera. A su encuentro salieron los creadores del gol del derbi: Jonathan Dubasin y, sobre todo, César Gelabert. Un rostro conocido. Y es que el palentino y el pequeño gijonés ya se conocían de antes. Por medio de un conocido, Liam ya había tenido la oportunidad de conocer a su ídolo. Por eso, cuando irrumpió en la sala de prensa, César le reconoció. 

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Tras intercambiar cromos, Liam se lanzó con su profecía. "Vas a marcar en el derbi asturiano", le dijo el joven a Gelabert, que respondió con una sonrisa. Por si las moscas, Liam subió la apuesta. "Si marcas, ¿podrías celebrarlo así?", realizando el gesto pensativo que el '18' del Sporting recrearía una semana después en el derbi asturiano. Gelabert cogió el guante y aceptó el reto. Siete días después, tras conseguir la igualada del Sporting de Gijón ante el Real Oviedo, el centrocampista rojiblanco celebró su primer gol con el gesto prometido a Liam. 

Una gran alegría para el pequeño que, evidentemente, estaba siguiendo lo que estaba pasando en el Carlos Tartiere. En un primer momento, las imágenes televisivas no permitieron ver la celebración del gol. Una pequeña decepción, pero pasajera. Una nueva repetición minutos después confirmó que César Gelabert había cumplido con su palabra con Liam, que vio como su profecía había sido vencedora. Si César ya era su ídolo, después de lo vivido este sábado lo será más todavía.