Compás de espera por la firma de Pachuca: Latores tendrá que esperar

A fuego lento. Así se cocina la nueva ciudad deportiva del Real Oviedo. El proyecto más ambicioso del Grupo Pachuca desde que aterrizó en la capital del Principado no va por el camino más recto. O al menos, no transcurre por el que las partes implicadas habían proyectado hace unos meses.

En marzo, el Ayuntamiento de Oviedo fue escenario de una reunión entre la propiedad del terreno, el Grupo Herce, y el presidente del club, Martín Peláez, con el alcalde de la ciudad, Alfredo Canteli, como testigo. Por aquel entonces, se había acordado el inicio de la construcción en cuatro meses. Y tenía su explicación. El Real Oviedo y el Grupo Herce se comprometieron en enviar al Ayuntamiento el escrito de modificación urbanística pertinente para que en esos terrenos se puedan explotar con los fines previstos, si bien el plan parcial solo contemplaba la construcción de viviendas unifamiliares. Una vez cumplido ese primer trámite, el Ayuntamiento de Oviedo se responsabilizaría en poder dar respuesta a esa solicitud también en dos meses. Es decir, echas las cuentas, la maquinaria tendría que haber empezado entre julio y agosto, coincidiendo así con el inicio de la siguiente temporada.

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Es evidente que nada fue así. Días antes de aquella reunión en el consistorio, el Real Oviedo celebró un acto, precisamente, en los terrenos de Latores donde iría ubicada la nueva ciudad deportiva. En aquella simbólica escenificación, Jesús Martínez enterró una caja en la que se encontraban un trozo de césped de El Requexón, una camiseta del Real Oviedo y dos periódicos. Un arcón que todavía aguarda la llegada de la primera excavadora.

Así todo, aquellos plazos no fueron los únicos que se han puesto sobre la mesa. Desplazados los anteriores, durante la pretemporada en México, a finales de julio, Jesús Martínez volvió a dibujar un nuevo escenario. "El Grupo Herce es el que está gestionando todas las cuestiones relacionadas con los permisos. Nos dicen que podríamos tener los permisos en noviembre, más o menos. Si se cumple, podríamos iniciar ese mes las obras", comentó a las cámaras de RTPA. Si esto hubiera sido así, se hablaba de que la primera fase de la ciudad deportiva estuviera lista para finales del 2024 o comienzos del 2025.

Finalmente, esos plazos nunca se cumplirán, si bien la firma de compra de los terrenos de Latores todavía no se llevó a cabo. Ahora, el escenario es distinto. Después de lo dicho en la Junta de Accionistas del pasado jueves, Pachuca y Herce tienen prevista una reunión en los próximos días para retomar el proyecto. El primer paso para el avance es la firma del conglomerado mexicano, pendiente, eso sí, de las garantías de los plazos para su construcción. Si la rúbrica se concreta, el proyecto se retomaría y la primera máquina podría estar trabajando en un plazo de un año, aproximadamente, una vez el Ayuntamiento haya perfilado todos los trámites burocráticos. De no disponer de las garantías necesarias, el conglomerado azteca podría retomar otras parcelas que se quedaron por el camino.