Dos errores y una derrota difícil para el Real Oviedo

Los azules cayeron en Girona tras un encuentro donde fueron superados en los primeros veinte minutos y en el que dos desajustes defensivos acabaron con la esperanza oviedista de acechar las posiciones de promoción de ascenso

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Real Oviedo
Un futbolista del Oviedo se lamenta sobre el césped de Montilivi
Mar, 08/03/2022 - 21:44

El Real Oviedo regresó el pasado lunes a los entrenamientos en El Requexón con el amargo sabor que supuso la derrota del domingo en Montilivi. Los carbayones cedieron ante el Girona tras un encuentro en el que no salieron bien y fueron muy inferiores a los catalanes. Minutos en los que el equipo de José Ángel Ziganda encajó un nuevo gol a balón parado, el cual acabó pesando a lo largo del resto del encuentro. Y es que en dos desajustes defensivos, los asturianos dejaron escapar a un rival directo en la lucha por la promoción de ascenso

Pasaban ocho minutos de partido cuando el Girona dispuso de una falta lateral a la altura de los banquillos. No era el primer balón del que disponían los catalanes en el encuentro, habiendo rematado el resto sin consecuencias para los carbayones. Pese a ello, en esta ocasión, la acción trajo las peores consecuencias. Si analizamos la jugada, la acción deja otra vez en el punto de mira a Joan Femenías, meta del Real Oviedo. 

En el momento de sacar la falta, Femenías se encuentra colocado muy cerca del borde del área pequeña, en una buena posición para dominar ese espacio de terreno de juego. Cuando el balón se pone en movimiento, el portero azul retrocede, y el primer remate de los locales acaba siendo en el área pequeña. A partir de ahí, los azules pierden disputas, hay un mal despeje al centro, y una segunda jugada en la que el balón sale rechazado a la frontal del área llega el primer tanto del partido. Una acción en la que la totalidad de jugadores del Real Oviedo se encuentra defendiendo el área pequeña, favoreciendo un disparo franco desde la frontal del área. 

El 1-0 parecía consecuencia de lo que se estaba viendo sobre el césped de Montilivi. Los azules no habían salido nada bien al partido, y se juntó una mala versión del equipo oviedista y una muy buena del Girona. Aunque el Real Oviedo acabaría ajustando su dibujo y dando un paso al frente, el daño ya estaba hecho. A partir de ese momento tocaba remar a contracorriente, a sabiendas de la calidad que tenían los de Míchel, cualquier mínimo desajuste acabaría decidiendo el partido. 

Stuani sentencia
Y este llegaba en la segunda mitad. El Real Oviedo estaba bien plantado sobre el césped tras el descanso, y las salidas de Borja Sánchez y Montiel dieron otra cara al equipo en ataque. Pese a ello, el paso de los minutos se hizo notar, y a los setenta de encuentro llegaba la puntilla definitiva. Jimmy, que se desplegó físicamente de forma notable todo el encuentro, no llegó a tapar a Baena, que recibió solo, con metros por delante y en una posición inmejorable. Una acción en la que Borja Sánchez tampoco llegó en la ayuda, por lo que el ataque local ya tenía la situación que quería. 

Baena tuvo tiempo para conducir, levantar la cabeza y filtrar un pase preciso que se coló entre una defensa de tres centrales. Stuani gana la espalda de Dani Calvo en velocidad y no perdona ante Femenías. El tanto de Borja Sánchez, dos minutos después, dio picante al encuentro, pero el daño ya estaba hecho. La derrota final deja un sabor de boca muy amargo. El Real Oviedo se aleja de la promoción de ascenso y este fin de semana jugará un partido clave ante el Valladolid