El Oviedo necesita más: Los nombres llamados a dar un paso adelante
Con la portería y la defensa asentadas, el equipo busca un salto de nivel en las piezas ofensivas y creativas
La Liga
El parón llega para el Real Oviedo como una oportunidad de reflexión interna. En un momento donde los resultados no acompañan, hay algo que sí parece haber encontrado estabilidad: la portería y la defensa. Aarón Escandell atraviesa un gran momento y la línea formada por Nacho Vidal, Costas, Carmo y Javi López apenas admite debate. A partir de ahí, el equipo necesita crecer en zonas decisivas, donde varios jugadores están llamados a ofrecer un punto más. "No podemos permitirnos seguir tropezando", resumió hoy Dani Calvo, una frase que define bien el sentir del vestuario.
En el centro del campo, la mirada pasa por Ovi Ejaria, un futbolista con talento y última acción que todavía no ha podido desplegar su mejor versión por problemas físicos. Luis Carrión ya avisó en Girona: "Debe ponerse al mismo nivel físico que sus compañeros". Si recupera ritmo y continuidad, puede convertirse en una pieza diferencial. También Leander Dendoncker debe ofrecer una mayor estabilidad. El belga, llamado a ser el eje del doble pivote, alterna buenos momentos con otros demasiado irregulares para una posición tan determinante. En este mismo sector, recuperar a Santi Cazorla será clave: su influencia futbolística y emocional es un estabilizador imprescindible en el tramo más exigente.
En la mediapunta y las bandas, el salto competitivo pasa por la aparición constante de nombres como Luka Ilic, Josip Brekalo y Hassan. Ilic, por condiciones, está llamado a ser decisivo entre líneas, pero sigue ofreciendo apariciones intermitentes. Brekalo llegó para marcar diferencias, aunque entre lesiones y falta de continuidad aún no ha podido mostrar su verdadero techo. Y Hassan, explosivo y desequilibrante, necesita transformar su impacto puntual en un rendimiento más sostenido para que el equipo gane verticalidad real durante los 90 minutos. Recuperar al franco-egipcio para la causa es, sin duda, una de las tareas pendientes del cuerpo técnico.
En ataque, el caso de Álex Forés es particular. No es una cuestión de rendimiento, sino de oportunidades. Su capacidad para atacar espacios, su movilidad y su trabajo sin balón pueden ser valiosos en un Oviedo que necesita piernas y agresividad en campo contrario, pero hasta ahora no ha encontrado una continuidad real en los planes de Carrión. Su perfil puede aportar soluciones distintas.
El Real Oviedo no está lejos de la salvación, pero sí necesita una reacción inmediata que pasa, inevitablemente, por la aparición de sus nombres importantes. Con la portería y la defensa ofreciendo seguridad, el equipo necesita ahora que sus piezas ofensivas y creativas den el salto que cambie la dinámica. El potencial está ahí; el momento de que aparezca, también.