El Sporting estuvo 22 minutos al borde de la alineación indebida

Lo que parecía un partido tranquilo pudo complicarse en la recta final. El Sporting de Gijón vencía al Numancia por 0-2 cuando Uros Djurdjevic entraba al campo para tratar de frenar el ímpetu soriano por recortar distancias. Era el minuto 69 y el equipo de Abelardo tenía por entonces a ocho jugadores con ficha del primer equipo sobre el césped y a tres del filial (Jordi Pola, Diego Sánchez y Nacho Martín). Hasta ahí todo correcto ya que el Sporting cumplía con margen la norma de alinear siempre a siete futbolistas como mínimo del primer equipo en un partido oficial. 

Siete minutos después, el número se redujo al límite. La autoexpulsión de Uros Djurdjevic conllevó al Sporting, que ya había agotado los cambios, a finalizar el partido con siete jugadores del primer equipo sobre el césped. Cualquier tipo de contratiempo, como una lesión grave que hubiera obligado a abandonar el campo a un jugador o una nueva expulsión, hubiera provocado que el árbitro tuviera que suspender el partido y al órgano disciplinario a decretar la alineación indebida del Sporting, con la correspondiente eliminación del torneo y la multa económica. 

Durante 22 minutos, el Sporting jugó con fuego. Con jugadores como Bruno González o Pol Valentín amonestados, cualquier tipo de falta hubiera desembocado en un desenlace nada deseado. Por ello, el cabreo de Abelardo con Cristo tras una acción con un jugador rival que pudo causarle un grave disgusto a su equipo si el canario hubiera seguido el camino de Djuka. Fuentes consultadas por Killer Asturias corroboran que el Sporting estuvo a una tarjeta roja de caer eliminado de Copa del Rey, 

El artículo número 223 del reglamento explica lo siguiente. "Una vez iniciado el partido, los equipos deberán estar integrados, durante todo el desarrollo del mismo, por siete futbolistas, al menos, de los que conforman la plantilla de la categoría en que militan. El hecho de que por cualquier causa, incluida la expulsión de un futbolista o la sustitución por lesión, el equipo quedase integrado por menos de siete futbolistas, podrá ser considerado como infracción de alineación indebida por el órgano disciplinario".

La norma también deja abierta la posibilidad de que el equipo en cuestión pudiera realizar un cambio para poder subsanar el número de fichas profesionales. El problema se encontraba en que el Sporting ya había completado las tres ventanas permitidas de sustituciones. La norma de contar con siete jugadores del primer equipo radica en el espectáculo en competiciones como la Copa del Rey y evitar que los equipos jueguen las eliminatorias con jugadores del filial. 

El Sporting jugó al límite del reglamento durante los 15 minutos restantes y los cinco más que se disputaron de añadido. Un riesgo que, en el caso de sufrir un nuevo contratiempo, hubiera costado caro al equipo rojiblanco. En ese caso, el árbitro hubiera decretado la suspensión del partido. Posteriormente, el órgano disciplinario hubiera decretado la alineación indebida del Sporting. Un problema del que se salvó el equipo rojiblanco a pesar de jugar con fuego durante 22 minutos.